jueves, 31 de enero de 2013

UNA DE PARTES ACCIDENTADOS

Sin frenos y a lo loco... podríamos decir de muchos de nuestros conductores al circular, pero también de muchos de nosotros al intentar explicar al seguro como ha sucedido nuestro accidente.
Declarar un siniestro a la compañía de seguros es a veces más complicado de explicar de lo que parece.
Como formadora de agentes telefónicos de primera linea siempre he insistido que cuando un cliente nos llame para dar un parte, es necesario preguntar al cliente qué ha ocurrido exactamente y NUNCA PRESUPONER, aquello que el cliente nos quiere decir, porque a la hora de tomar un parte una palabra mal entendida u obviar alguna  información puede hacer que de  ser un parte de reclamación al final hablemos de un parte de culpa siendo difícil después dar "marcha atrás " a la hora de cambiar la versión que hemos recogido de nuestro asegurado.

Por ejemplo : " No es lo mismo, indicar que el contrario tenía la puerta abierta que decir que abría la puerta en el momento en el que mi vehículo pasaba". En el primer caso seremos culpables del siniestro y en el segundo la responsabilidad es del conductor que abre la puerta de su vehículo sin tomar las debidas precauciones.
Por supuesto siempre es necesario solicitar a nuestro cliente la versión por escrito, si no ha podido cumplimentar una  declaración de accidente. En otros post no obstante repasaremos aquellos pasos imprescindibles para tomar correctamente un parte de accidente a nuestro asegurado con el fin de gestionar de forma eficaz su tramite.
No obstante y a pesar del esfuerzo que podamos hacer para tomar nota lo mas fielmente posible de lo sucedido siempre podemos encontrarnos con versiones de los clientes como las que os muestro a continuación y con las que no dejaras de esbozar una sonrisa. 

PROPIETARIO. Volviendo al hogar, me metí en la casa que no es, y choqué contra el árbol que no tengo. 
A TRAVÉS DEL CRISTAL. Creía que el cristal de la ventanilla estaba bajado, pero me dí cuenta de que estaba subido cuando saqué la cabeza a través de ella. 
MALINTENCIONADO. El otro coche, choco con el mio, sin previo aviso de sus intenciones.
UNA DE PEATONES. El peatón choco contra mi coche y después se metió debajo.
OMNIPRESENTE. El tío estaba por toda la calle y tuve que hacer varias maniobras bruscas antes de darle.
LA SUEGRA. Saqué el coche del arcén, mire a mi suegra y me fui de cabeza al terraplén.
CUARENTA AÑOS. Llevaba cuarenta años conduciendo cuando me dormí al volante y tuve el accidente. 
OTRA DE PEATONES. Para evitar colisionar con el parachoques del coche de delante, atropellé al peatón.
PARADO MARCHA ATRÁS.  Mi coche estaba correctamente aparcado cuando retrocediendo le dio al otro coche.
COCHE FANTASMA. Un coche invisible que salio de la nada me dio un golpe y desapareció.
LOS VIEJOS DAN PUNTOS. Estaba convencido de que el viejo no llegaría nunca al otro lado de la calzada cuando le atropellé.
CORRE, CORRE QUE... El peatón no sabia en qué dirección correr así que le pase por encima.
TIPO BAJITO. La causa indirecta del accidente fe un tipo bajito, en un coche pequeño, con una boca muy grande.
SOMBRERO HERIDO. Le dije al policía que no estaba herido, pero cuando me quité el sombrero descubrí que tenia fractura de cráneo.
CARA TRISTE. Vi una cara triste moviéndose lentamente, cuando el señor mayor rebotó en el techo de mi coche.
CAMIÓN ASESINO. Un camión retrocedió a través de mi parabrisas y le dio a mi mujer en la cara. 

Espero que te haya gustado.

















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